¿Conoces tus cimientos?
¿De qué material estás hecho?
¿De confianza, alegría, generosidad, amor?
¿O de vulnerabilidad, inseguridad, pena profunda, miedo o resentimiento?
Llevamos mucho tiempo con una corriente que, a mi parecer, ha sido desviada de su cauce y corre el riesgo de llevarse por delante todo lo edificado en su nombre.
A todos nos suena la frase ¡Si quieres puedes! Y yo no me canso de desmentirla cuando la escucho. Lo que recibo ante semejante afirmación mía, son por un lado, variados gestos de incomprensión y por otro, un agradecimiento profundo que, de manera inconsciente tiñe la mayoría de las miradas.
La realidad es que como dice mi buena amiga y socia en Global Vestigia, Cristina Mulero,
QUERER es solo el PRIMER paso de PODER.
¿A qué se debe tremenda afirmación por nuestra parte?
A lo largo de mi trayectoria profesional he ido observando la maravillosa evolución de personas extraordinarias con las que he tenido el privilegio de trabajar.
Haciendo un ejercicio de observación desde la perspectiva actual un día descubrí que de manera inconsciente he ido aplicando un FACTOR que considero CLAVE a la hora de que las personas que vienen a consulta, consigan aliviar su dolor emocional y su sufrimiento
(para mí)
no hay personas enfermas,
solo hay personas heridas.
Si, heridas. Ya sea con traumas con T mayúscula o con t minúscula, como los llaman dentro de algunos paradigma. Y nadie puede eludir estas experiencias ya que son parte intrínseca de la vida y del desarrollo humano. Se dan mayoritariamente en los 7 primeros años de vida, incluido el periodo intrauterino, y generan los cimientos sobre los que conformaremos nuestra particular manera de ver y de responder al mundo.
Por eso, cuando tú dices,
“no es que no quiera, es que no puedo”, yo te doy la razón.
Pero también te digo que,
afortunadamente, eso, lo podemos cambiar.
Pero nada de poner parches y de aprender a vivir con el dolor, SOLO LOS HUMANOS HACEMOS ESO. No verás a ningún animal prolongar sus duelos (que los tienen) más del tiempo natural, ni quedarse paralizados después de haber sido perseguidos por su depredador. Ellos saben cómo aprender de esas experiencias y de manera rápida y eficaz, liberarse de las emociones que les hayan suscitado.
¿Quieres saber cómo liberarte de esos frenos que tienes pero que no sabes de donde proceden?
¿Quieres vivir libre de verdad?
¿Borrar las huellas del pasado definitivamente?
Entonces, te espero en la próxima entrega de esta serie creada para transmitirte que con las herramientas adecuadas,
SI, SE PUEDE.
Desde el corazón, desde todo mi ser, os abrazo.
Como siempre… Inspiradora y todo corazón!!!
Abrazo
¡¡Muchísimas gracias Felí!!
¡Un abrazo grande!
Interesante propuesta lanzada y completamente de acuerdo, la libertad es un camino complicado, pero transitable.
¡Con ganas de leer las próximas entregas!
La libertad asi como el cambio, es una puerta que se abre desde dentro. ¡¡Gracias Yago!!
¡¡Un abrazo grande!!
Simplemente.. Me encanta!
Si, se puede
¡Muchísimas gracias Ana! ‘Así es. Sanar las heridas y caminar. Entonces, si se puede avanzar al ritmo de nuestras verdaderas posibilidades.
‘Un abrazo!!
Hola Taniuja!!! a pesar de que me encantas y disfruto siempre leyendote … se que eres muy capaz pero yo soy de las que….. Si quieres puedes!!!! Ahora bien…. Con herramientas….. MUCHO MEJOR….jajajaja. Espero tus proximas entregas prometen ser interesantes. Te echo de menos….. Que tendra Madrid…….
jajajaja claro que sí Ana!! Lo que se trata es que aquello que se desee alcanzar o desarrollar se consiga de una manera más fluida, sin tanto sufrimiento, con todo nuestro potencial REAL disponible para ello. Madrid como Elche y Alicante, personas maravillosas, corazones con «patas» llenos de vida. ¡Te quiero amiga mia!
Estoy convencido de qué si quires, puedes…lo que nadie te explica es que dentro de este querer y poder, se encuentra tambien la opción de buscar ayuda cuando te faltan herramientas para poder superar algo que con tu nivel de conciencia actual desconoces y te impide avanzar… al final el querer, es poder darte cuenta que a veces no puedes solo.
Efectivamente Francisco, así es. No es una cuestión de voluntad como se la llama, la mayoría de las veces. Hay muchos más factores involucrados que hay que valorar y trabajar con las herramientas más adecuadas según cada caso, pero siempre teniendo claro, que no pasa nada si nos equivocamos, si vamos a un ritmo diferente al de los demás o si en un momento dado, dejamos cosas por el camino. Lo más importante es vibrar en la coherencia de saber quienes somos, por qué y para qué vivimos determinadas experiencias, estar donde queremos desarrollando lo que nos hace fluir y sentirnos felices la mayor parte del tiempo.
¡Un abrazo muy grande, Francisco!